Durante este fin de semana se llevó a cabo una nueva jornada de la “Ruta Alba”, iniciativa solidaria donde participaron socios y voluntarios del CSD Colo-Colo junto a la Fundación Colo-Colo Social. El recorrido se extendió a través de varios puntos de la zona norponiente de Santiago, donde se hizo entrega de alimentos, ropa y la compañía de los colocolinos y colocolinas.
“Ruta Alba” es una actividad que se desarrolla desde hace tres años, semana a semana. Debido a las implicancias sanitarias que acarreó la pandemia a causa del COVID-19, su frecuencia se vio alterada durante los últimos meses. En esta ocasión, el trayecto contó con la colaboración especial de los integrantes de la Ruta Alba Sur y de Cerro Navia, quienes además recibieron un aporte de alimentos enmarcados en la celebración de la Navidad Colocolina.
El itinerario contempló visitas al Cerro Renca, Toma Lo Boza, Hogar de Narcóticos Anónimos en Costanera Sur, Río Mapocho y el ex Hospital Félix Bulnes, para cerrar el trayecto en la Toma Nueva Andrés Bello, donde se compartió con cuatro familias migrantes de Perú, hinchas de Alianza Lima y Colo-Colo.
Victoria Aravena, Directora del área Social del Club evaluó de manera positiva esta nueva salida a terreno y ya proyectó lo que será el cierre de año: “tenemos varias cosas planificadas, entre ellas visitas de niños, niñas y adolescentes, de personas con capacidad intelectual severa, además de las Rutas. En general, hacemos la edición de la Ruta Alba Norte, ya que tenemos cerca un campamento donde hay mucha infancia, entonces les llevamos regalos, dulces. Es más enfocada en ellos, al igual que la Ruta del Mes de la Niñez”.
Aravena también aprovechó la oportunidad para hacer un llamado a quienes deseen unirse a esta cruzada. “Quienes quieran participar nos pueden escribir al [email protected] o [email protected]. Una vez enviado el correo, los podemos direccionar al representante de la Ruta más cercana que tengan”, agregó.
Por su parte, Alexsandra Santander, socia del CSD Colo-Colo y voluntaria en la jornada, destacó la importancia de este tipo de actividades para el pueblo albo: “Participar en la Ruta Alba es una experiencia tremendamente emocionante. Ver que Colo-Colo es más que cancha, que nos une como personas para poder ayudar a otros que más nos necesitan. Demuestra el tremendo corazón que tenemos los colocolinos. Es muy bonito participar y que el Club Social sea una enorme obra”.
Para finalizar, Victoria enfatizó en la importancia de que el padrón de socios siga creciendo día a día. “Es super importante la cantidad de socios ya que nos permite dejar el nombre de Colo-Colo en el territorio y dejarlo bien parado. Nuestra ayuda se extendió más allá de los socios y socias. No miramos color político ni menos de camiseta a la hora de tender una mano. Es por eso que agradecemos el aporte de los socios, ya que gracias a ellos estamos pudiendo dejar ayuda donde hay ausencia del Estado en las poblaciones más vulneradas”, sentenció.
Demuestra que somos campeones dentro y fuera de la cancha. Súmate como voluntario de la Ruta Alba. ¡El club del pueblo necesita la ayuda de todos los colocolinos y colocolinas!