El partido comenzó con alta intensidad. Colo-Colo buscó por las orillas en los pies de Solari y Opazo, quienes alimentaron constantemente a un solitario Parraguez. El “Búfalo” buscaba repetir la buena actuación del partido anterior, donde anotó dos goles en la victoria por 3 a 0 sobre Santiago Wanderers.
Sin embargo, el partido se inclinó rápidamente a favor la escuadra contraria. Zavala y Garrido llegaron con profundidad poniendo en jaque a la defensa alba, donde Gutiérrez parecía no encontrarse del todo cómodo. Parraguez luchó cada pelota que le servían pero, lamentablemente, no encontró compañía para seguir las jugadas, cediendo el balón al rival.
De esta manera, Colo-Colo se fue al descanso con un empate parcial y con la presión de anotar en la segunda mitad. Desde el banco Gustavo Quinteros reaccionó rápidamente y llegaron los cambios: ingresaron Morales y Fuentes en reemplazo de Parraguez y Cruz.
Iván entró con hambre de gloria y en los primeros tres minutos se inventó una jugada que pasó cerca del arco defendido por Peranic. De ahí en más, Colo-Colo siguió presionando de tres cuartos de cancha hacia arriba, pero sin profundidad.
En el minuto setenta “La Ruca” se congeló tras un gol de Segovia. Rápidamente los hinchas presionaron para que el árbitro revisara la jugada, ya que el jugador se encontraba en posición de adelanto. Luego de varios segundos de tensión, el juez concedió el saque de fondo para el Cacique y todo volvía a cero.
Colo-Colo sintió el golpe y buscó desesperadamente abrir la cuenta. En un en enredo por parte de la zaga de “Los Potros”, Barrera le cometió penal a Maximiliano Falcón y Leo Gil se hizo dueño del balón. Sin embargo, el “Colo” desde los doce pasos no logró cobrar la pena máxima y estrelló el balón contra el vertical izquierdo.
De ahí en adelante el partido se complicó. Bruno Gutiérrez se vio superado en velocidad en una contra, cometiéndole falta a Zavala, quien estaba posicionado como último hombre. Tarjeta roja y el juvenil se fue directo a las duchas.
Cuando parecía que ambos equipos repartirían puntos, un remate de Solari dio en la mano de un defensa melipillano. El árbitro volvió a consultar al VAR y cobró un segundo penal. Emiliano Amor tomó decidido el balón y con nervios de acero, se paró frente a la galería norte y con un potente remate desató la locura en el Monumental.
De esta manera, Colo-Colo se quedó con el encuentro de la fecha 31 y nuevamente se posiciona como líder exclusivo del Torneo Nacional. El próximo encuentro del Cacique tendrá lugar este domingo a las 18:30 ante Curicó en calidad de visita.
