Esta memoria es un pequeño resumen de más de 4 años de
trabajo serio, metódico y transparente por parte de decenas de directores, directoras,
trabajadores, trabajadoras, colaboradores y colaboradoras de Colo Colo, quienes
han intentado estar a la altura del desafío de conducir la Institución civil
más grande de Chile y posicionarla nuevamente como un referente ineludible en
lo deportivo, social y cultural en pos del desarrollo del país y su pueblo.
Después de cuatro años, para nadie es un misterio que el
inicio de este Directorio al mando de Colo Colo fue complejo y tuvo tareas titánicas.
El Club se encontraba en estado de abandono, donde no se cumplía con los
estándares mínimos que un mandato con estas características requería, como lo
es, por ejemplo, un traspaso de gestión transparente con rendición de cuentas e
información. Al escenario anterior, se sumó una situación económica paupérrima,
que incluyó el traspaso de millonarias deudas y compromisos económicos que
superaron los 200 millones de pesos.
La situación no era la óptima, y a ello se sumó la
inexperiencia propia de los integrantes de este directorio, quienes, por
primera vez se enfrentaban a cargos dirigenciales, que en el pasado les fueron
negados a otros socios y socias por no pertenecer a un cierto grupo o casta.
Ante este escenario, el primer objetivo fue ordenar la
institución, lo que implicó tomar medidas dolorosas, drásticas y resistidas,
como lo fue el cierre de la rama de Básquetbol por no ser sustentable económicamente.
No obstante, hoy al mirar atrás, reafirmamos que, gracias a estas medidas, el
Club comenzó a crecer y cimentó las bases de lo que es en el presente y será en
el futuro.
Es necesario destacar que esta solidificación de la
Institución, no hubiese sido posible sin la participación y compromiso de
ustedes, los miles de socios, socias, e hinchas quienes siempre han estado en
esta construcción colectiva.
Somos nosotros y nosotras los llamados a seguir construyendo
una institución ejemplar. Debemos demostrar en el día a día que los valores
propios de nuestro Club, como son la solidaridad, el respeto por el compañero y
compañera, y el trabajo transparente, pueden forjar un porvenir gigante para la
institución y que, no sólo el interés personal y patrimonial mueva nuestro
mundo.
Finalmente, los invitamos a seguir soñando, trabajando y
construyendo para que más temprano que tarde nuestro Colo Colo vuelva a lo más
alto de América con sus socios, socias y el trabajo colectivo como pilar
fundamental.
Atte.
Fernando Monsalve
Arias
Presidente CSD Colo
Colo