Hablar de la historia de Colo-Colo es hablar de David
Arellano Moraga, quien nació el 29 de julio de 1901. Fue un profesor normalista
y jugador de fútbol que luchó por los derechos igualitarios de sus compañeros
de Magallanes, renunciando a dicho Club junto a «Los Rebeldes» de
1925 por falta de oportunidades y decidiendo fundar un nuevo Club: lleno de
valores, que buscaba profesionalizar el fútbol y que hasta la fecha vive
arraigado profundamente en el corazón de millones de personas.
A 121 años del natalicio del primer capitán del Cacique,
Álvaro Campos, integrante del área de Patrimonio del CSD Colo-Colo y Sebastián
Salinas, autor del Libro “Por Empuje y Coraje” que repasa la historia de
Colo-Colo en toda su etapa amateur, repasan la historia de quien fuera un
estudioso de las tácticas de sus rivales y que en ella aprendía y aplicaba
después en el Club que desde sus inicios marcó pauta en el país.
“David Arellano es el motor de la Fundación de Colo-Colo
junto con su hermano Alberto. Es el líder indiscutido y quien tiene la visión
de porqué es necesario irse de Magallanes. Fue el primer jugador chileno en ser
goleador de una Copa América y Colo-Colo es el primer equipo chileno en
instaurar un entrenamiento obligatorio extra, y a veces entrenar los fines de
semana cuando no se jugaba. Es ese entrenamiento extra el que hace que
Colo-Colo marque diferencias suficientes para ser llamado el equipo invencible
en el año de su nacimiento”, comentó Salinas.
“Sino hubiera muerto David Arellano en 1927 el desarrollo
del fútbol chileno hubiera sido más acelerado, hubiese tomado un camino
diferente, nos habría ido mejor en el Mundial de 1930 y en la época del 30.
Lamentablemente murió muy joven y eso hace que se pierda el líder. Creo que va
a tardar mucho tiempo para que Chile vuelva a tener una nueva camada de gente
tan destacada como él”, agregó.
Por su parte, Álvaro Campos, quien además participó en la
reedición del libro “El Deportista Mártir” que escribió Alberto Arellano en
1929, destaca el rol de David Arellano durante la gira realizada por Europa
durante 1927.
“Era muy lector, muy interesado en el teatro, en la música,
el folklore. Era quien tocaba la guitarra en los viajes. David tenía un
liderazgo más allá de la cancha. Era quien todos escuchaban cuando hablaban”,
comentó.
Durante la gira por Europa, y luego de ganar Colo-Colo por
6-2 a Real Valladolid en España, llegó ese fatídico 1 de mayo de 1927 cuando en
la revancha ante el mismo rival recibió un golpe en el minuto 35. De aquel
golpe no se recupera y sufre una peritonitis traumática que le quita la vida
trágicamente el 3 de mayo de 1927.
“Falleció muy joven y con 24 o 25 años hizo una revolución
en el fútbol chileno que se mantiene hasta el día de hoy”, manifiesta Sebastián
Salinas.
“Esta tragedia marcó mucho al pueblo chileno, él que se
llena de dolor, pero también de orgullo porque cuando muere David Arellano
muere como héroe. Ese dolor y ese orgullo es una mezcla que sella el pacto
entre Colo-Colo y el pueblo chileno”, agrega Campos.
Tanto Salinas como Campos coinciden en señalar que sin David
Arellano Colo-Colo no es lo que sería, por mucho de que él haya estado solo dos
años. Ese es un legado que se inicia aquel 3 de mayo de 1927 y que durante 97
años su recuerdo siempre ha guiado a Colo-Colo por la senda triunfal.