Días agitados son los que ha vivido en las últimas horas
José Miguel Sanhueza, director de Blanco y Negro S.A, designado por el Club
Social y Deportivo Colo-Colo. El sociólogo ha tenido diversas apariciones en
los medios de comunicación con la finalidad de aclarar diversos temas de la
actualidad deportiva e institucional del Cacique.
En primer lugar, realizó un balance de lo que fue la
temporada 2020, manifestando su deseo de que Colo-Colo vuelva tener éxitos
deportivos y nunca más una campaña como la realizada, en la que terminó luchando
por perder la categoría en el último partido.
“Un año muy malo en todo sentido, que afortunadamente no
terminó en el peor de los escenarios posibles, pero en el que sufrimos cosas
que Colo-Colo NUNCA MÁS puede volver a sufrir. Hay varias decisiones de este
2020 que propiciaron este escenario, pero también hay que decir que esto no es
fruto sólo del año 2020, es la coronación de la crisis crónica de un modelo y
una gestión que simplemente ya no resultó”, dijo.
“La mesa actual de ByN es completamente insostenible tal
como está, necesita cambios profundos no sólo en cuanto a nombres sino a la
forma de trabajar que se ha acumulado estos 15 años. Estamos también
disponibles para ser parte de esos cambios, en pos de que el fútbol de
Colo-Colo comience de una vez a volver al control democrático de sus socios y
socias”, agregó.
Autocrítica
En ese sentido, José Miguel Sanhueza realizó una fuerte
autocritica a lo realizado en el directorio de la concesionaria y reconoció las
gestiones realizadas por los directores del CSD Colo-Colo presentes en la mesa
de ByN para revertir algunas decisiones.
“No fuimos lo suficientemente claros y enfáticos
hacia la opinión pública y nuestras propias bases en expresar las diferencias
que sostuvimos siempre en el seno de la mesa de ByN, respecto a decisiones que
fueron críticas en llevarnos a esta situación: el envío del plantel al AFC,
dilatar excesivamente la contratación de un nuevo DT, enviar a Matías Zaldivia
a la mutualidad, el papelón organizativo en el partido no jugado con Deportes
Antofagasta, el ofrecimiento de un premio de 300 mil dólares por no descender”,
sostuvo.
“En particular respecto del tema del AFC,
intentamos siempre promover un acuerdo entre el plantel y la mesa de ByN, pero
no lo conseguimos. Pudimos haber agotado muchas más instancias de diálogo, ser
un puente de encuentro y promotores de que ambas partes pudieran ceder más que
lo que lo estaban haciendo, y así evitáramos esta posibilidad que resintió
tanto las confianzas en la institución”, comentó.
Somos una
alternativa
Mirando a futuro, José Miguel Sanhueza no duda en
proponer que sea el CSD Colo-Colo el que vuela a liderar a la institución en su
conjunto para así dejar atrás años de pelea entre los bloques controladores del
fútbol del Cacique.
“Llevamos muchos años atrapados en una pelea
intestina entre grandes bloques accionarios y ya conocemos los resultados. El
CSD COLO-COLO tiene la convicción y el compromiso moral e histórico de
presentar una alternativa para liderar el fútbol de Colo-Colo y darle una
gobernabilidad de largo plazo, a través de un nombre que el Club proponga”,
señaló.
“El Club no solo es portador de un amor
incondicional a Colo-Colo, sino también de demostrada capacidad de gestión en
todos los ámbitos que el Club sí controla directamente y ha desarrollado en el
último tiempo, por ejemplo, un crecimiento exponencial del padrón de socios y
socias, el saneamiento económico de una institución que el 2013 se recibió más
de 200 millones abajo, el desarrollo de ramas deportivas sustentables y con
varias categorías, filiales a lo largo de todo Chile e incluso en el extranjero,
una intensa actividad social que ha acompañado a muchos compatriotas que más lo
han necesitado”, puntualizó.
El Proyecto
del CSD Colo-Colo
Sanhueza recalcó que el CSD Colo-Colo presentó el
año 2019 un documento de Lineamientos Estratégicos para un gobierno de cuatro
años de la concesionaria, con un compendio de propuestas en materia
institucional, deportiva, social y cultural, entre las que se destaca:
Un gobierno corporativo que funcione, donde las
funciones y responsabilidades de directivos y gerencias estén claramente
delimitadas y se respeten los conductos, donde las comisiones sean espacios de
trabajo y análisis con participación activa de todos los actores, con espacios
de efectivo control democrático y no meros buzones de decisiones tomadas en
forma unipersonal.
Un desarrollo del Fútbol basado en una Política
Deportiva, que articule todo el deporte de Colo-Colo sobre la base de valores
compartidos, donde la formación de deportistas y personas sea lo central. Colo-Colo
debe dejar de ser un club principalmente comprador y debe avanzar hacia ser un
Club Formador, destinando un mayor porcentaje presupuestario para
infraestructura y recursos humanos para el fútbol joven.
“Entendemos que el horizonte de largo plazo es que
el fútbol de CC vuelva a su gente y por ello también aprovechamos el espacio de
pedir a los Senadores de la Comisión de Constitución que hagan avanzar el
proyecto que modifica la ley de Sociedades Anónimas Deportivas, permitiendo que
corporaciones sin fines de lucro puedan gestionar deporte profesional,
fortaleciendo la fiscalización a las SADP abiertas o cerradas, y abriendo
espacios de participación de socios e hinchas en aquellos clubes donde las
corporaciones fueron arrasadas”, comentó.